Durante este taller se recorre este camino - Estado del arte - El camino existente y hay esperanza - ¿Dónde empiezan los conflictos? - Protocolo de actuación - Sexting - Ingenieria social - Grooming

Ruah: Conociendo al Espíritu Santo, es una propuesta que nace de la Renovación Carismática Católica (RCC) de Argentina para la Iglesia, pero sobre todo, nace para recordarnos que todos los días, no solo en Pentecostés, podemos decir: Ven Espíritu Santo y renueva nuestro ser, nuestra familia, nuestra catequesis, nuestra comunidad, nuestro país, nuestro continente, nuestro mundo. Hoy y siempre, el Espíritu Santo nos llama, nuevamente, a congregarnos en torno a María, para recibir la fuerza y la alegría del Hijo resucitado. Pidamos al Padre y a Jesucristo, que a imitación de María y los apóstoles, seamos receptivos al Espíritu que siempre está viniendo. Él siempre quiere transformar nuestras vidas, llenarlas de sentido, para que seamos capaces de demostrar nuestro amor por Cristo, siguiendo sus pasos e imitando su entrega amorosa. Impulsado por el Plan Pastoral Nacional y el lema del 2024 de la Renovación Carismática Católica de Argentina: “RCC, con María ensancha tu tienda”, “Despliega tus lonas sin mezquinar” Inspirados por las palabras del Papa Francisco a la RCC, el 1 de junio de 2014: “Renovación Carismática, has recibido un gran regalo del Señor. El nacimiento del movimiento fue deseado por el Espíritu Santo para ser una Corriente de Gracia en la Iglesia y para la Iglesia. Esta es tu identidad: ser una Corriente de Gracia.” Y del Papa Benedicto XVI, en la Homilía de la Solemnidad de Pentecostés, el 4 de junio de 2006. Antes de la ascensión al cielo, “les mandó que no se ausentaran de Jerusalén, sino que aguardasen la Promesa del Padre” (cf. Hch 1, 4-5); es decir, les pidió que permanecieran juntos para prepararse a recibir el don del Espíritu Santo. Y ellos se reunieron en oración con María en el Cenáculo, en espera de ese acontecimiento prometido (cf. Hch 1, 14). Permanecer juntos fue la condición que puso Jesús para acoger el don del Espíritu Santo.